Texto y foto: M.Sc.
Miguel A. Gaínza Chacón
El periodista e
historiador santiaguero Joel Nicolás Mourlot Mercaderes es una de las
personalidades que en Cuba han tratado minuciosamente, la impronta de la
familia Maceo Grajales, y en especial la vida y obra del general
Antonio.
En ocasión del 122.
aniversario de la caída del Titán de Bronce, sería presentado en esta ciudad el
libro “El hombre de excepción. Episodios y facetas de Antonio Maceo”, del autor
Mourlot Mercaderes. Sobre detalles de la obra trató una conversación con Joel
Nicolás en su hogar del barrio Tivolí.
“El título obedece a una frase de Dulce María Loynaz y no es en sí un título con el fin de demeritar o de enfrentar a otras personalidades de nuestra historia sino sencillamente, es un gancho.
“El libro es, en
realidad, una proyección cronológica de la vida de Antonio Maceo pero sin
pretensión de hacer una biografía. No es una biografía pero tiene todos los
elementos por los cuales se puede seguir la trayectoria de vida de Antonio
Maceo a través de los momentos más excepcionales de su obra como
independentista, como antiesclavista, como ciudadano
ejemplar. No es una compilación de artículos como se ha hecho tradicionalmente.
Son artículos que precisan más sus características principales como héroe, como
ciudadano, como persona ejemplar.
EL PRIMERO… NO EL
ÚNICO
“Sí, como libro es el
primero. Pero yo he participado en muchas producciones historiográficas que son
compilaciones de varios autores. Por ejemplo: Visión múltiple de Antonio
Maceo; Aproximación a la familia Maceo; Santiago, ciudad bravía;
otro libro sobre Mariana Grajales. El primero que responde a mi autoría
total es este.”
Le agregamos que no
será el único y añadió:
“No, no. Incluso se
nos quedaron fuera algunas cosas muy importantes, porque no queríamos
publicarlas sin que estuvieran ciento por ciento comprobadas. Y decidimos
reservarlas para una segunda edición, como es el caso de las heridas… las
verdaderas heridas de Antonio Maceo… temas así, que son polémicos…
“Yo creo que lo
principal de este libro es que contiene un conjunto de novedades, tanto de
hechos como de valoraciones y de interpretaciones acerca de la trayectoria
heroica de Antonio. Por ejemplo, hemos encontrado partes de guerra que lo
valoran en lugares donde nunca se le había dado el protagonismo que tuvo, como
es el ataque al poblado de Samá, en Holguín, en 1872. En ese parte lo elogia
extraordinariamente el propio Calixto García.
“Hay un combate del
que nunca prácticamente se había hablado: el de Cayo Rey. Pero es que alrededor
de este hecho hay un conjunto de otros 10 combates que nunca se habían
señalado, y nosotros tuvimos la ocasión de tener el parte de guerra de Antonio
de esos acontecimientos, entonces lo describimos en el libro. Nos referimos
incluso a las seis heridas que allí sufrió Maceo y de las que nunca se había
hablado en un libro sobre él. Estos son documentos que hemos encontrado en
archivos.
“Tampoco se había
hablado sobre qué pasó después de la Protesta de Baraguá. Primero hacemos una
reinterpretación de la Protesta no como un hecho concreto, no como una
entrevista concreta sino como todo un proceso de rechazo al Pacto del Zanjón,
haciendo el enfoque de que la Protesta no fue un gesto simbólico, no fue algo
suicida sino que fue un cálculo; que fue todo un proceso bien pensado al que no
respondieron los factores que tenían que responder, por diferentes causas. Y
especialmente tratamos, qué pasó después… Son 70 jornadas de acciones, de
combates, que siempre se habían omitido, y nadie lo había divulgado.
“Incluimos la
participación de Maceo en la Guerra Chiquita pero a través de la oposición que
le hicieron algunos personajes; también hacemos una interpretación importante
sobre la carta que él le escribe a José A. Rodríguez el 1. de noviembre de
1886, donde por primera vez en toda la historia de Cuba se habla de la
formación de un Partido para dirigir la lucha.
“Hay un trabajo
interesante, con aspectos muy novedosos, sobre el movimiento de 1890 que
dirigió Maceo aquí, enfocándolo con la verdadera proyección desde 1889 en que
vino Flor Crombet, o sea que fue una conjunción de esfuerzos y de pensamientos
entre Flor y Antonio Maceo para encabezar un movimiento insurreccional en Cuba,
que debió estallar en 1890.
“Está el papel de
Maceo en el desarrollo del grito de independencia de 1895, y especialmente
sobre cómo la presencia de él ayuda a salvar la Revolución que ya parecía que
se iba a malograr; está su papel como el principal financiero de la
Revolución inmediatamente después de empezada la guerra; la formación del
gobierno de la República de Cuba en armas; la Invasión; hacemos una
interpretación sobre la Campaña de Occidente, donde demostramos cómo fue
realmente abandonado y cómo la dirección del Consejo de Gobierno y de la
delegación de la República de Cuba en Armas en el exterior no tuvieron en
cuenta verdaderamente la importancia de esa campaña para prodigarle toda la
ayuda que era menester.
“También su muerte…
pero no analizamos las versiones de su muerte ni cómo ocurrió esta sino
sencillamente el sentido que tuvo para la Revolución la caída de Maceo.
“Algo muy importante
y que nunca se había proyectado era la Cuba que Maceo quiso. A través de fragmentos
de su pensamiento, de entrevistas que le habían hecho, él va reflejando qué
Cuba quería para después de la Independencia.
“Y hay una carta, que
le escribe él a dos personajes de la política española: Segismundo Moré y
Fernando León y Castillo, protagonistas liberales de la política española. Esa
carta jamás se había publicado en Cuba, solamente como parte de un folleto y de
una interpretación no muy ortodoxa que digamos, por parte de la Fundación
Fernando León y Castillo, que nos confirmó la existencia de la misiva, puesto
que el documento realmente me lo había dado a mí hace varios años, el Dr.
Fernández Carcassés, que a su vez lo había recibido de la que era presidenta de
la UNIHC en Villa Clara, Ileana Hechavarría, si mal no recuerdo su nombre, para
ver qué se podía hacer con ella. Y por fin, logramos confirmar su autenticidad
y después la publicamos con comentarios pertinentes.
“Por último, el libro
tiene una cronología que a mi modo de ver es la más completa, más actualizada y
más atenida a la verdad que se ha hecho sobre Antonio Maceo.
“En sí ese es el
conjunto, la obra. Quizás algunos elementos los haya pasado por alto porque
estamos así a memoria pero creo que va a ser una contribución al estudio de la
vida de Antonio Maceo y al estudio de las guerras de independencia.”
Tuvo Mourlot
Mercaderes palabras de elogio para la editorial Del Caribe, de la Casa del
Caribe, encargada del libro; para Francisco León Estrada “que ha hecho una
edición magnífica”; para el coordinador Julio Corbea “que ha sido una de las
almas de este proyecto”; para David Mourlot “mi hijo, que proyectó la
capitulación de la obra”.
Y por supuesto, “hay
que agradecer enormemente a la Fundación Caguayo, y de forma especial a su
presidente, Alberto Lescay, por el respaldo tremendo sin el cual yo pienso que
no se hubiera podido realizar este libro siempre susceptible de ser
perfeccionado, de mejorar en una segunda edición”.
“El hombre de
excepción. Episodios y facetas de Antonio Maceo” tiene 415 páginas y fue
presentado este 7 de diciembre, en el Salón de los Vitrales de la Plaza de la
Revolución, a pocos metros de los 23 machetes alegóricos a la Protesta de
Baraguá y de la figura ecuestre del Titán de Bronce, que llama a los cubanos al
combate.
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